sábado, 16 de julio de 2011

Hagamos un trato...

Muchas veces las personas discuten...a veces por cosas que realmente merecen gran importancia, y otras muchas por cosas insignificantes, minúsculas e inapreciables.

A veces sentimos dentro fuego, odio, temor, soledad...a veces encaramos nuestras almas en un un estúpido pleito, en una disputa que no tiene principio ni final, ni pies ni cabeza...y nos olvidamos de amar.
El amor... ese sentimiento del que nadie sale impune, la manera en la que se te eriza la piel cuando estás con la persona a la que amas, ese sentimiento inigualable...

El amor, el motivo por el cual nunca pararía de besarte y pedirte que me lleves contigo a las estrellas...porque todo se ve tan bonito contigo, todo se vive tan nítido a tu lado amor, que no quisiera nunca volar si no es a tu lado, no quiero desplegar mis alas si no es contigo... 
Por eso quiero proponerte un trato...no perdamos nunca más ni un solo segundo de nuestro tiempo en discusiones inútiles y sin sentido; prométeme que cada vez que nos enojemos en lugar de miradas cargadas de odio me besarás fuertemente y en lugar de pronunciar cosas absurdas lo único que podremos decir es un simple "te quiero", de esos que te llegan a lo más profundo de tu corazón. 
¡Hagamos un trato! Yo estaré ahí siempre para ti, y tú no dejarás que yo me pierda...

Te quiero y no solo quiero hacer este trato, quiero hacer otros miles contigo...pero eso ya es otro capítulo de nuestra interminable historia.